Viajar en tren puede resultar una auténtica maravilla. Acomodarse en sus asientos, el traqueteo del vagón y las fantásticas vistas del paisaje. Esta experiencia puede resultar tan reconfortante que algunas personas incluso la eligen como plato fuerte de sus vacaciones. Te contamos a continuación cinco famosas rutas en tren que se han convertido en una vivencia única en la vida. Una de ellas, además, está en España.
Bernina Express: de Suiza a Italia a través de los Alpes
El legendario recorrido a bordo del Bernina Express, que atraviesa el precioso paisaje alpino, cuenta con más de 100 años de historia, y es Patrimonio Mundial de la Unesco. El recorrido empieza en Chur, para continuar por Davos, St. Moritz, el valle de Engadina, el de Valposchiavo y acabar en Tirano (Italia). Verdes valles, imponentes castillos, casitas de cuento, montañas de ensueño, espectaculares viaductos… la cultura suiza y la italiana unidas por tierra en tan sólo cuatro horas de trayecto.
Tren de Rauma: la línea ferroviaria más bonita que atraviesa Noruega
El tren Rauma cubre el recorrido entre Åndalsnes y Dombås, dos pintorescos pueblecitos noruegos separados por bosques que parecen sacados de un cuento de hadas. El vehículo es humilde: nada más que un tren de cercanías que, de atravesar tanta belleza, se ha convertido en un must para los forofos de los trenes. Además, el tren turístico que opera en verano ralentiza el paso y efectúa paradas al pasar por los lugares más espectaculares del recorrido.
Línea del Duero, o cómo atravesar Portugal en un tren histórico de vapor
El río Duero se encuentra acompañado en el camino por esta fantástica ruta en tren que dura apenas tres horas. Durante el viaje se ofrece música local, copas de dulce oporto y varias mujeres vestidas con delantal blanco venden Rebuçados da Régua (caramelos duros de miel). Toda una experiencia dentro de un tren de vapor inaugurado en 1925 que realiza una ruta circular partiendo de la ciudad de Peso da Régua.
Transcantábrico Gran Lujo: ocho días de buena vida
En 1929 se inauguró la línea Bilbao-San Sebastián. Este tren era un lujo sólo asequible para las clases más pudientes: tres de sus coches tenían un pequeño bar, los camareros atendían al viajero en la propia butaca y la vajilla que había en el tren fue encargada a la misma empresa que hizo la del Titanic. Este servicio se abandóno, pero en 1983 se renovó en lo que hoy se conoce como el Transcantábrico Gran Lujo, un tren que recorre la distancia que separa San Sebastián de Santiago de Compostela a 45 kilómetros por hora, parando por las noches en la estación. Son ocho días de viaje ambientados en aquellos grandes lujos de la época de los años 20 en los que te sentirás dentro de la película de ‘El gran Gatsby’.
The Jacobite, el descubrimiento de la Escocia más impresionante
No podemos acabar este post sin mencionar una de las rutas más famosas en tren, debido (sólo en parte) a su aparición en la película Harry Potter. The Jacobite ha sido declarado en varias ocasiones como el recorrido en tren más espectacular del mundo. Este antiguo ferrocarril cubre, entre ida y vuelta, 135 kilómetros de paisajes impresionantes que han sido escenarios de películas tan míticas como Braveheart. Uno de sus puntos fuertes es el momento en el que cruza el viaducto de Glenfiman, desde donde se puede contemplar el precioso lago Shiel.