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Tal día como hoy, en 1931, comenzó a construirse la presa de Hoover, una de las más altas de Estados Unidos, con 221 metros, y una de las más grandes y conocidas del mundo. Fue el proyecto de construcción más grande emprendido por el gobierno estadounidense con un coste de 50 millones de dólares, aproximadamente. Cuando fue terminada, seis años más tarde, se convirtió en la presa más grande del mundo.

Esta obra fue construida en el Black Canyon del río Colorado. La elección de la cerrada es por la gran altura del cañón y su angostura, lo que permitía tener un ahorro considerable de hormigón.

El motivo de la construcción de Hoover, principalmente, fue el control de las grandes inundaciones que se daban en la zona debido al crecimiento del río Colorado, además para abastecer de agua a las poblaciones aledañas, para la generación de energía y el riego agrícola. Aunque hoy en día también se ha convertido en un importante destino turístico.

La creación de esta presa llevó a la creación del Lago Mead, un enorme embalse que suministra agua a más de 20 millones de personas.

Problemas durante la construcción

La ubicación de la presa Hoover trajo varias problemáticas para su construcción. En este lugar, el río Colorado tiene un gran caudal, especialmente durante los meses de lluvia y tormentas, desviarlo llevó mucha planificación y trabajos muy duros sobre las rocas del cañón.

El problema del difícil acceso al sitio de trabajo se solucionó construyendo líneas ferroviarias para transportar materiales. Otras líneas se usaban para transporte de trabajadores, maquinaria y la unión con ciudades cercanas como Los Ángeles y Las Vegas.

Un nombre polémico

El impulsor de la obra fue el entonces presidente de los EE.UU (1929-1933), Herbert Hoover, cuya imagen en esos años era negativa debido a la crisis que sufría el país por la Gran Depresión. La opinión popular criticó el nombre de Hoover para la presa, por lo que fue nombrada Boulder. Años más tarde, en 1947, su nombre fue ratificado por el congreso estadounidense como presa Hoover.

Turismo

La obra una vez terminada sirvió como ruta para los lugareños de Nevada y Arizona y para los visitantes, pero debido al crecimiento de las poblaciones cercanas a la presa y el lago Mead, sumado al aumento de turistas, la ruta de la presa Hoover comenzó a ser un gran problema de tráfico. Es por esto por lo que, en los años 2000, comenzaron nuevos proyectos como una ruta de desvio de la presa Hoover y a su vez la creación en 2010 de un puente arco de 322 metros de altura para atravesar el río Colorado y visitar la presa.