Aunque no lo creas, también puedes ahorrar en casa haciendo home office. La adaptación a la modalidad de teletrabajo no siempre es fácil y puede generar dudas acerca del gasto que genera pero existen claves para que puedas trabajar de la manera más eficiente.
Desde el inicio de la pandemia las empresas han cambiado la modalidad de trabajo, evolucionado del tradicional al teletrabajo o home office. Cada vez más, se está implantando esta nueva modalidad como la mejor opción para aumentar la productividad de los empleados.
Y es que, según un estudio realizado por la Universidad de Stanford, las personas que trabajan en casa son al menos 13% más productivas debido a que tienen una administración propia e individual de sus tiempos.
Pero trabajar más desde casa supone un incremento de los gastos, sobre todo en luz, debido a la gran cantidad de horas que pasas frente a un ordenador. Desde Mutualidad Caminos, queremos darte 3 claves para que puedas ahorrar en casa haciendo home office.
1. Presta atención a la iluminación
Resulta importante elegir una zona con una buena fuente de luz natural, porque además de cambiar por completo tu experiencia de trabajo y aumentar tu productividad, ahorrarás en gasto energético.
2. Ajuste de termostatos
Según la OCU, “tener la vivienda a 21ºC en lugar de 24ºC recorta en un 20% el consumo energético, al igual que se ahorra no bajando el aire acondicionado por debajo de 23 o 24ºC”. Este ajuste de termostatos de calefacción y aire acondicionado permitirá que ahorres en casa.
3. Desenchufa el ordenador
¿Cuántas veces has dejado el ordenador encendido después de trabajar? Seguro que muchas. Y es que no damos importancia a este aspecto, pero mantener enchufado el ordenador durante una jornada de 8 horas, consume alrededor de 1 kilovatio por hora, que aproximadamente son 12 céntimos. Si lo dejamos durante todo el día, el incremento es mayor.
Aunque no supone un gasto notable, la OCU insiste en apagar los aparatos electrónicos cuando no los estemos utilizando por que recortarás así un 10% de tu consumo energético.
No temas al home office. Ahora que conoces estas claves, comienza a sacarle provecho sin miedo a incrementar tus gastos.
