Diferentes entre ellos. Unos más majestuosos. Otros más sencillos. Los puentes son símbolo de unión entre ciudades, países y caminos a un lado y al otro del mundo.
Europa es insignia en estas grandes construcciones. Tiene emblemáticos puentes que día a día son visitados por miles de personas. Hoy os enseñamos cinco de los puentes más emblemáticos de Europa.
- Ponte Vecchio, Florencia
Data del 1345 y es un puente medieval situado sobre el río Arno. Es el más antiguo de la ciudad de Florencia (y el puente de piedra más antiguo de Europa). Su estructura es muy llamativa: el puente se sostiene sobre tres arcos; el principal tiene una luz de 30 metros y los otros dos de 27 metros. El alzado de los arcos varía entre 3,5 y 4,4 metros.
Las construcciones sobresalen sobre el río y por encima, pasa el famoso Corredor Vasariano que conecta el Palazzo Vecchio con el Palazzo Pitti.
- Pont Neuf, París
Este puente cruza el río Sena y es el más antiguo y largo de París. Fue el primero en construirse en piedra puesto que los anteriores eran de madera. Además, se trata del puente más largo de la ciudad. Cuenta con una longitud de 232 metros.
Este consta de dos tramos, con vanos de anchura desigual: el que conecta con la margen derecha, de 156 metros y 7 vanos, y el que conecta con la otra orilla, de 85 metros y 5 vanos.
- Puente de Rialto, Venecia
Si bien en Venecia podemos encontrar magníficos puentes, el Puente de Rialto es el centro geográfico de la ciudad y sin duda, el emblema de la capital más romántica de Europa.
Es el más antiguo de los cuatro puentes que cruzan el Gran Canal veneciano y su particular belleza, radica en su estructura de único arco con comercios a cada lado de las rampas.
Consta de un largo de 48 metros, un ancho de 22,1 metros, y un gálibo de 7,5 metros.
- Tower Bridge, Londres
Es el más famoso de la ciudad británica. Se trata de un puente levadizo con dos torres majestuosas sobre el río Támesis. Este ofrece unas vistas panorámicas increíbles de la ciudad. Además, algunas partes del suelo contienen vidrio creando una sensación de vértigo al cruzarlo.
La fortaleza del medioevo normando se conserva perfectamente y alberga diversos edificios (entre ellos un palacio, mazmorras, capillas, varios museos) así como las famosas joyas de la Corona.
- Puente de Carlos, Praga
Es el puente más viejo de Praga y el segundo más antiguo en la República Checa. Debe su nombre a quien mandó a construirlo en el siglo XIV, el emperador del Sacro Imperio Germánico Carlos IV.
Este conecta la Ciudad Vieja con la Ciudad Pequeña y está asentado sobre 16 arcos sobre el río Moldava. Está decorado con 30 estatuas de santos y personajes ilustres situadas a ambos lados del puente. Sus casi 10 metros de ancho son transitado únicamente a pie, aunque hasta hace pocos años también circulaban coches.
No podemos cerrar este pequeño repaso a algunos de los puentes más destacables de Europa sin hablar del puente de Alcántara, que lleva 2.000 años soportando el paso sobre el río Tajo.
“Que nadie construya puentes en España sin haber pasado por Alcántara” dejó escrito nuestro compañero Don Carlos Fernández Casado; nada más que añadir.